De entrada, debo confesar sin cortapisas que Laura Pausini me cae muy bien. No he tenido nunca en mi vida un disco de ella, pero estoy seguro de que si voy a un concierto suyo me sabré más canciones de las que imagino. Más allá de su voz, que me parece un portento, su personalidad me encanta. Cuando la vi interactuar como jurado en diversas ediciones del talent show La voz, me impresionó. Fue amor a primera vista por su sentido del humor, su calidad humana y su cercanía. Les guste o no la artista italiana, Amazon Prime Video tiene disponible en su plataforma el documental biográfico Laura Pausini, un placer conocerte. Si se quiere, uno más en esta tendencia de marketing de los cantantes y muchas veces intentos desesperados por humanizarlos ante el público. Sin embargo, y si se compara con otros productos similares, el de Laura tiene sus particularidades.
Lo bueno
Para empezar, hay que reconocer que este documental es cursi. No hay duda sobre esto. Pero dentro de su propia cursilería, resulta muy auténtico. No hay que ser un genio para entender que Laura es así, igual de cursi. Este documental, a diferencia de otros similares, se siente más orgánico. No parece buscar montar en un altar a la artista ni endilgarle una cantidad absurda de virtudes, todo lo contrario, es un recorrido sencillo, directo y claro de su recorrido artístico. De hecho, como es un camino tan simple, se ha combinado con una historia paralela e imaginaria de cómo hubiera sido su vida de no haberse dedicado al espectáculo. El documental está contado en primera persona (a fin de cuentas, es una idea de la misma Laura, que también coescribe) y muestra facetas muy domésticas de su vida, como la relación con sus padres, sus amigas del colegio, su esposo y su hija. Adicionalmente, no romantiza la fama, deja ver las preocupaciones, tristezas, miedos y soledades que acompañan el éxito. Si le tienen cierto cariño a la Pausini, es posible que agradezcan este acercamiento íntimo a su vida. Si les es un tanto indiferente, es la oportunidad de disfrutar un rato y conocer mejor a la mujer detrás de una de las mejores voces de la música contemporánea.
Lo malo
Si tienen problema con la cursilería, puede que eso les choque al ver este documental. Resulta un poco extraño que la Laura de la ficción sea más empalagosa que la Laura real. La creación imaginaria de cómo sería la artista de no haber ganado el festival de San Remo (que fue lo que dio inicio a su carrera profesional) la convierte en un personaje un poco muy bueno, abnegado, entregado y adorable a fuerzas. Creo que no era necesario llevarlo tanto lejos, pero bueno, son decisiones creativas. Se sorprenderán con que Laura no es mala actriz.
Lo feo
Personalmente, como amante de la música, extrañé un poco que Laura no hablara más íntimamente de lo que la música significa para ella, de sus procesos para componer, de los instrumentos que toca, de los cuidados de su voz, del descubrimiento de su talento. Estas cosas se tocan tangencialmente, pero a mi juicio, es muy corto y lejano. Entiendo que acercarse a muchos de estos asuntos puede coquetear con el ego, pero a fin de cuentas, es el talento y la perseverancia lo que la han mantenido vigente por más de 30 años ininterrumpidos. No hablar más de eso me parece mezquino.
